SEMBLANZA
UN DÍA COMO EL DE
HOY
Un día como el de
hoy, pero hace 80 años, en una esquina como tantas del barrio Cerrito de la
Victoria, en Juan Rosas y Santa Ana, un grupo de muchachos decide cumplir su
sueño de jugar al fútbol armando su propio cuadro. Es así como los hnos Pizzi,
Emilio Pronzolino, el “turco” Marino,
Teodoro Amato, Víctor Bovino, Lorenzo Gamba, Mariano Medina, Juan Spino entre
otros se dan el gusto de armar al viejo Rentistas. Todos sabemos el motivo del
nombre, todos sabemos el espíritu que ellos perseguían. Lo que ellos no sabían
era que a través del tiempo, ese espíritu se transformaría en una parte de la
historia del barrio y un sentimiento futbolístico que hoy nadie puede explicar.
No sólo jugaron al
fútbol, su amor por el deporte los llevo a jugar también al basket, pero sus
carencias económicas, que contrastaban con su nombre, los llevaron a que a
inicios de la década del 40 tomaran la drástica decisión de dejar de competir.
Pero Rentistas
siempre tuvo un “ángel de la guarda” que en momentos difíciles y críticos le
“salvó la vida”. Y ese “ángel del la guarda” no solo armó nuevamente al cuadro del barrio
sino que tuvo tanto coraje que lo afilió a la AUF , comenzando a competir en la vieja Extra B.
Ahora era más
complicado, si antes había sido difícil mantenerlo compitiendo en las ligas de
barrio, hacerlo en la AUF
era mucho más.
Pero, Rentistas,
siempre tuvo ese “no se qué” que lo caracterizó siempre, y no sólo se mantuvo,
sino que comenzó a cosechar triunfos y títulos que lo llevaron en menos de 20
años a militar en la divisional B. Pucha que eso era bravo, pero la barra, la
vieja barra del Renta siempre tuvo gente que estuvo dispuesta a dar todo en pos
del cuadro. Es así como en el año 71 vio un hecho del cual, sus fundadores
nunca habían soñado. Rentistas, el cuadro que se había formado como barra de
amigos, con camisetas hechas con la tela que se encontró a mano, que había
estado a punto de desaparecer, estaba en la divisional A.
Ahora sí, que se
puso difícil, había que jugar contra los más copetudos del glorioso fútbol
uruguayo. Y sin embargo la cosa no estuvo del todo mal. No sólo se pudo
competir de igual a igual durante casi una década con los más poderosos sino
que se logró consolidar un hermosa sede social en pleno Gral. Flores y un campo
de deportes en la zona de Mendoza.
Pero,
lamentablemente, mantenerse era sumamente complicado y a principios de la década
del 80 descendimos nuevamente a la vieja divisional B. Pero algo había cambiado
en todos, no queríamos jugar en esta divisional. Nos sentíamos capacitados para
seguir jugando de igual a igual con los más fuertes. Pero el camino del retorno
no fue fácil, hubo que esperar unos años
hasta el 88 en que nuevamente la sabia futbolera del Renta volvió al círculo de
privilegio. Y nuevamente estuvimos casi una década jugándole de igual a igual a
los más fuertes. Pero la cruda realidad esta vez nos pegó más duro que nunca.
El fútbol profesional era cada vez más difícil de poder sobrellevar.
Económicamente no estábamos de la mejor manera y los problemas a causa de la escasez
de recursos nos hicieron tambalear. Muchas reuniones, muchas asambleas de
socios, muchas propuestas, desde fusiones hasta la desafiliación a la AUF.
Pero como siempre, Rentistas tuvo “ángeles de la
guarda” que nos sacaron las castañas del fuego. Fue así como se armó una nueva
Comisión Directiva y esta vez arrancó con un proyecto nuevo que se basaba
fundamentalmente en el trabajo en juveniles.
Y fue así como en
el año 96 retornamos a primera división. Ese año sí que fue duro. Las empresas
privadas que comenzaron a manejar el poder en la AUF exigían cancha en exclusividad y nosotros no
la teníamos. Pero el ingenio de la bohemia de nuestra gente pudo más que el
poder y fijamos para jugar de locales el estadio de Florida. Había que hacer
200 km para ver jugar al bicho. Pucha que hay que ser hincha para bancar esa!!.
Pero nuestra gente lo hizo y fue así como en la primavera del 96, los
habitantes del altar de la patria, vieron como la punzó casaca de nuestro club,
llevaba casi 3 mil personas a alentar a nuestro equipo que ya había logrado el
ascenso y estaba en busca del campeonato. Y esas 3 mil personas armaron una
caravana de casi 2 km .
por ruta 5 y los accesos a Montevideo, para el asombro de quienes no conocen en
realidad a la gente del rojo.
Pero nuevamente los
problemas se acercaban, porque quienes manejan el poder establecieron que en el
Estadio de Florida, no se podían jugar partidos de primera división. No vaya a
ser cosa que Rentistas se haga fuerte en su barrio y también en el interior.
Pero eso no era todo, porque pese a esa prohibición igual teníamos que tener
cancha en exclusividad. Se nos venía la noche; pero la misma nunca llegó.
Nuevamente apareció ese “ángel de la guarda” para iluminar a la Directiva de turno y
hacer el esfuerzo de construir nuestro propio estadio en nuestro propio predio
de Mendoza. Y así fue. Los contras y los que manejan el poder no sólo no
pudieron con nosotros sino que se tuvieron que bancar que en el 98, Rentistas
inaugurara su estadio con una campaña, la mejor en su rica historia, que por
poco nos lleva a la obtención del torneo Clausura.
Si bien no
obtuvimos el título, obtuvimos algo que nunca habíamos soñado.
Rentistas había clasificado para un torneo internacional,la Copa Conmebol. La ilusión de la
gente, de la barra de la cantina, se vino abajo cuando por decisión del la CSF se dejó de disputar ese
torneo por ser deficitario para sus arcas.
Rentistas había clasificado para un torneo internacional,
Pero ya nada sería
igual en nuestro club, ahora éramos un equipo con aspiraciones en serio en un fútbol
profesional que de profesional y de serio iba teniendo cada vez menos. Como las
exigencias iban siendo cada vez mayores y sumados a una crisis económica que
nos afectó durísimo tuvimos que volver a la B.
Pero por poco tiempo ya que en el 2003 logramos nuevamente el
ascenso.
Pero esta vez si
que iba a ser bravo porque a nivel de AUF se exigía cada vez más a los clubes y
cada vez estábamos más desprotegidos. Si estaríamos desprotegidos que en la
temporada 2004-2005 estuvimos a punto de lograr el viejo sueño de clasificar a
un torneo internacional, pero un polémico arbitraje del Sr. Gustavo Méndez nos
lo impidió. Tan polémico, como toda su carrera arbitral.
Nos habían quitado la ilusión de la Libertadores o
Sudamericana.
Pero no fue todo.
En la temporada 2005-2006 nuevamente fuimos victimas del despojo arbitral, vaya
uno a saber por qué, y nuevamente un árbitro que pasó por nuestro fútbol sin
pena ni gloria, el Sr. De Groote, nos dice que no a un torneo internacional en
una mañana de domingo.
Pero nuestro equipo
que estaba bien ensamblado no pudo mantener su plantel, los equipos más
poderosos, apañados por los empresarios que buscan su beneficio económico se
reforzaron con nuestros planteles, dejándonos nuevamente y en poco tiempo en la B.
Pero fue por poco
tiempo. La rebeldía de la “barra de Industrias y Gral. Flores” logró, pese a
las dificultades un nuevo ascenso. Y volvimos a descender. Pero pese al
traspié, nos negamos, nos revelamos y estamos peleando para volver. Esta vez,
bajo la conducción de uno de los nuestros. Estamos convencidos que de la mano
de Adolfo “Fito” Barán volveremos.
Y cuando me
preguntan porque soy hincha puro y casto de Rentistas la respuesta surge sola.
“El Renta” es mucho más que un cuadro de fútbol. “El Renta” fue una Escuela,
fue Rey Mago, fue regalos para los niños pobres del barrio en Reyes y El Día
del Niño, fue Carnaval, fue….fue mi Universidad de la Vida.
No puedo, en esta
semblanza, dejar pasar por alto algunos nombres que hoy me vienen a la memoria,
porque un club sin memoria no tiene sentido de ser. Desde los Pizzi, los
Pronzolino, Marino, Bueno, y otros fundadores que se me escapan a la memoria,
los Presidentes y Dirigentes de todas las épocas, de los jugadores que nos
hicieron conocer, como el loco Gualberto Díaz, el “Toto” Larraura, Vasconcellos,
Medina, los crack del 71, Miguel Piazza, el “chumbo” Siviero, Carlos Lasanta, Gustavo Fernández, el “mojarra” Da Silva, el “negro” Cufré”, el
“flaco” Balerio, Martín Lasarte, el
“Fito” Barán, el “lagarto” Meloño, el “Karibito” Morales” y tantos otros que
por ser tantos seguro que estoy cometiendo el error de olvidar a muchos. Y ni
que hablar de los “viejos”, esos
“viejos” que hoy están entre risas y sonrisas escapándose allá arriba para
armar la cantina y prender un fueguito pa` festejar el aniversario. Y allí veo
al Canario Falcón, a Roberto Leites, al Tito Clouzet, al Barril Mendy, el
Pocho Méndez, al Gallego Gimeno que esta con un vaso en la mano y con su
tercia voz cantando el himno del club, y justo cuando el “tinta” Miguel Silva
está repartiendo banderas y papel picado para armar el coro, ante la sorpresa
de todos llega el “flaco” Vicente con Eros a sumarse al coro, que desde el
cielo no deja de cantar: “Se oye por el Cerrito de la Victoria…..”
LADRAN SANCHO, QUE
SABRÁ LA GILADA!!!
AGUANTE EL RENTA,
CARAJO!!!
Gustavo Lorenzo
Socio 1951
Buenísima la semblansa.
ResponderEliminarFeliz cumpleaños Rentistas querido.
Gracias por todas las alegrias!!!
Diego
Gustavo, enviale este relato a los de la pagina de el ascenso. Tiene errores sobre nuestra historia.
ResponderEliminarGabriel
Y el 5 de abril nos vemos en la sede para el gran festejo. VAMOS LOS BICHOS COLORADOS!!!! EL GRANDE DEL BARRIO!!!!
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarLos que tuvimos la suerte de estar presentes en el festejo de nuestros 80 años, nos quedara por siempre el recuerdo de lo lindo que estuvo dicho agasajo.
ResponderEliminarPor eso, FELICIDADES RENTISTAS y ojala una vez por mes, podamos todos los verdaeros hinchas del Bicho, organizar un asadito en nuestra sede, para juntarnos y charlar un rato.
Gracias Rentistas por existir y ser parte de mi vida y tambien de la vida de mi familia.
Salu!!!!